
Imagino que se preguntarán cómo es que Paris llegó hasta ahí, si ayer comentábamos lo compungida que se veía cuando se presentó ante la Corte de Nevada. Lo cierto es que la rubia millonaria ya tenía programado visitar una serie de destinos para promocionar su nueva fragancia, entre los que se encontraba el país asiático.
Por supuesto, jamás se le ocurrió cancelar su viaje para guardar las formas, sino que –seguramente– luego de la audiencia se fue directo a preparar su equipaje. Lo que ella no sabía es que en Japón tienen leyes migratorias muy estrictas con respecto al ingreso al país de extranjeros que han recibido condenas o han estado involucrados de alguna manera en asuntos de drogas.
Paris Hilton llegó esta madrugada en su avión privado y acompañada del séquito que siempre lleva a todos lados. Pero no pudo salir a la calle antes de que fuera detenida por varios agentes fronterizos que le realizaron muchas preguntas. En primer lugar le permitieron hospedarse en un hotel del aeropuerto, hasta que la Justicia de Japón determinara si podía ingresar temporalmente al país y cumplir con los contratos promocionales de su nueva fragancia. Finalmente, tuvo que regresar a Los Ángeles porque la respuesta de las autoridades fue negativa.
Por si no lo recuerdan, la situación legal de Paris Hilton ha sido bastante complicada desde que le encontraron cocaína en su bolso, mientras paseaba por Las Vegas con su novio, Cy Wait. Luego de mentir a la policía (dijo que la cartera era prestada), tuvo que declararse culpable. Como ya ha sucedido en otras oportunidades, la Justicia se mostró tendenciosamente indulgente con ella y sólo le impuso una fianza de 2 mil dólares, 200 horas de servicio comunitario y un año bajo vigilancia.
Pero esta vez las cosas no le salieron tan bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario